PROYECTO DE INVESTIGACIÓN
MONITORIZACIÓN POR CTDNA DE LA ENFERMEDAD MÍNIMA RESIDUAL EN PACIENTES QUE INTERRUMPEN TRATAMIENTO TRAS OBTENER UNA RESPUESTA COMPLETA MANTENIDA POR UN MÍNIMO DE 4 AÑOS CON TRASTUZUMAB – PERTUZUMAB POR UN CÁNCER DE MAMA METASTÁSICO HER2-POSITIVO
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Equipo investigador:
• Antonio Llombart Cussac, Investigador Principal
• Javier Cortés
• José Pérez-García
• Juan Miguel Cejalvo
• Álvaro Rodríguez Lescure
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Fecha de inicio: segundo trimestre de 2025.
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Descripción:
PHENIX es un proyecto multicéntrico internacional que explorará la oportunidad de interrumpir terapia sistémica en pacientes con prolongado control de enfermedad (más de 4 años) a una terapia de primera línea con trastuzumab – pertuzumab para un cáncer de mama metastásico HER2[+] y que no presenten enfermedad mínima residual (MRD mediante determinaciones de ctDNA utilizando un test de alta sensibilidad en la muestra inicial).
Todas las pacientes que participen y puedan interrumpir tratamiento serán monitorizadas de forma trimestral mediante nuevos test de ctDNA y aquellas que en alguno de los test de control hagan una seroconversión (test positivo a MRD) serán reconducidas a su tratamiento original. La hipótesis es que al menos el 90% de las 180 pacientes participantes permanecerán libres de enfermedad / MRD-negativo a los dos años de interrumpir el tratamiento y por tanto con alta probabilidad de estar libres de enfermedad de forma definitiva.
Nuestro estudio será el primero en proporcionar a un grupo seleccionado de pacientes con cáncer de mama avanzado una forma potencialmente segura de concluir la terapia sistémica en un escenario de remisión a largo plazo con un seguimiento a nivel molecular.
Los beneficios potenciales de este estudio son enormes, por un lado para las pacientes, la consecución del objetivo principal; qué pacientes con enfermedad metastática permanezcan libres de enfermedad a nivel clínico/molecular a más de dos años de interrumpir tratamiento supondrá un cambio en la definición del cáncer de mama metastático como una enfermedad incurable; y para el sistema sanitario, actualmente no se contempla interrumpir el tratamiento con TP en pacientes con enfermedad avanzada. El coste de este tratamiento se sitúa en Europa en el rango de los 40.000 a 55.000 € anuales por cada paciente.
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